martes, 8 de abril de 2025

Lunes

 
Nadie me espera
en la estación, 
de nadie soy;
de ningún lugar vengo, 
tan lejos que 
soy el arpegio
de una canción
que es llevada 
en la marea del cielo, 

nadie te sueña 
como yo, 
borracho de ideal 
que sólo en ti creo, 
soy la luz 
que tintinea
en la pupila del amor, 
del tipo que mira
al verte 
en este despropósito
de lunes lleno.

Y a pesar 
de ver tu rostro
en las corrientes
del tiempo, 
me declaro culpable
de desearte
como quien ama
lo que nunca ve 
pero sabe cierto.


No hay comentarios: