Rastrojos de lo que fue nuestro,
arden en la desesperación de aquel tiempo
que no vivimos .
Y una vida no es suficiente
para entender que la tempestad
se esparce por los anales de nuestro
pensamiento.
Lleno de olvido, vacío de ti,
la poesía que nunca escribí tiene letras aladas
y entre las alas
la palabra
con la que habla el porvenir.
Vacío de todo,
lleno de ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario