martes, 28 de agosto de 2018

Arder


Arde mi piel en cada rastrojo de vida
que sucede tras el vuelo de un avión, 
destino a donde nace una caricia
cuando se pierde con ella la luna y el sol.

Se apagan sombras encendidas, 
que dictan mi alma las luces del destino,
miedo a no entender el camino
de tantas noches cerradas por heridas.

Y cuando todo se acabe solo quedarán cante
de ser eco tras los fuegos fatuos de la desilusión,
todo empieza cuando es ceniza el arte
al arder verso a verso en la voz.


No hay comentarios: