lunes, 8 de septiembre de 2014

Tómate la felicidad


Tómate la libertad de volar allí donde  nadie podrá explorar del todo la esencia, donde nadie podrá robarte el universo que te alumbra, desafíate ante tus raíces que se pierden y se encuentran dentro de ti mismo.

Tómate la felicidad de romper tus zapatos con el sordo devenir de terremotos e insultos. Todos quieren competir entre ellos; te negarán si eres lo suficiente valiente para decir o aparentar lo que te apetezca, duro peaje para quien prueba el suave néctar de bailar sin música. Todos se rendirán ante la belleza pero pocos te entenderán sin embargo y tus lágrimas, mezcla de ansiedad y extravío, regarán de azul el pasto oxidado del tiempo, de tu tiempo! Préndelo!
Y mantén la templanza mientras, para entender la educación establecida sin dejar de ser servil y no vomitar en la cara de alguno.


Las ramas deshechas por el viento de la incomprensión te saludarán cada lunes de todos los días. Mírate las palmas de las manos; cuando no sepas distinguir las arrugas de las líneas, respira quedo y solo desafía al miedo que te han dicho que se debe tener. Todavía.